Gracias a los amigos que compartieron con nosotros tiempo en Cancún: Fernando, Gabi + Michelle y Rick… pasamos un tiempo excelente y pronto los volveremos a encontrar.
Con ellos tuvimos la oportunidad de disfrutar de lugares como Isla Mujeres y en nuestro trayecto ahí, el Museo bajo el Agua, por supuesto los alrededores de Cancún…
Les tengo que decir que Cancún es hermoso pero no me emociona tener que ver tantos turistas y precios en dólares, así que no tengo mucho que contarles. Lo mejor que nos pudo haber pasado en el área nuevamente es haber conocido gente cálida y buena.
Aquí es donde inicia un viaje con mi hermano de Cancún hasta Ciudad del Carmen Campeche, donde pronto me daría cuenta que cargar a mi hermano de pasajero no sería lo más conveniente. Por supuesto cargar el equipaje de él, más el de nosotros tampoco. Entre Brian y yo nos lo turnamos pero es algo que no volveríamos a hacer porque no nos hace sentir cómodos en muchos aspectos pero principalmente en el tema de la seguridad (re: peso y distribución del mismo).
Aún con el inconveniente del peso disfruté enormemente la compañía de mi querido hermano y rodamos la siguiente ruta: Cancún-Tulúm-Chichén Itzá (visitando el Cenote de Ik-Kil)-Izamal-hacia la costa hasta llegar a Progreso-Mérida-Muna (pasando por el Cenote San Ignacio)-Campeche-Ciudad del Carmen.
Gracias hermano por hacer el esfuerzo de compartir tu tiempo conmigo (y tu Cumpleaños) y además entender mis necesidades, tú sabes a que me refiero. Te amo… Espero volver a rodar contigo pero con tu propia moto!!!
De Ciudad del Carmen nos dirigimos a Coatzacoalcos Veracruz y lo único que les puedo contar es que desde que entramos a Campeche el ambiente cambió; de entrada unos conductores borrachos nos recibieron casi causándonos un accidente al seguirnos muy de cerca y pasarnos de una manera súper agresiva en unas curvas.
Tabasco no cambió, al contrario empeoró. Los conductores muy pero muy agresivos, tipo Colombia, pasándonos por la derecha. Además déjenme decirles que al pasar por Tabasco no hay muchas opciones de caminos. Aquí descubrí la ciudad con la mayor cantidad de topes: ATASTA.
Finalmente llegamos a Coatzacoalcos para disfrutar de la compañía de queridos amigos: Luciano y Alma (y familia). Después de dos agradables días partimos hacia Córdoba donde no duraríamos mucho puesto que partimos nuevamente hacia la ciudad de México. Lo más relevante de mi llegada a Córdoba fue haber visitado a mi madre en el Día de las Madres…
Nuestra viaje a la ciudad de México resultó en dos cosas: una visita muy satisfactoria a la revista para la cual escribo Boxer-Motors y una tos bastante desagradable de la cual aún tengo rezagos y por tal motivo poca energía, misma que me falta para poder escribir con detalle lo que he vivido en esta parte de nuestra jornada.
Sin embargo así sucede, altos y bajos; ahora me encuentro en un bajo del cual estoy saliendo lentamente. Mis días en Córdoba serán dedicados a la familia, a planear la ruta al Norte y a observar… observar para poder comentar más adelante.
