Compartir con mis suegros ha sido agradable, una experiencia que deseamos volver a repetir. Ahora entiendo al 100% por qué se dice que cuando uno se casa el matrimonio es de dos pero se adquiere a toda la familia; es obvio y me siento afortunada de haber adquirido una familia de calidad, dispuestos a amarme y soportarme como dice mi madre.
Los pasados días fuimos testigos de cómo se vive la vida en un pueblo pequeño de Canadá, de acuerdo al Censo de Población del 2006 Tofield contaba con 3745 habitantes. La vida parece lenta, amigable, libre de estrés, sin crimen, la gente se preocupa por los demás y Mary pasa a dejar frambuesas a la casa provenientes de su jardín. Al mismo tiempo es un poco aburrido no contar con oportunidades variadas para desarrollarse o divertirse. Mis suegros tienen un buen círculo de amistades y actividades que les permiten mantenerse activos y felices. La capital de la provincia de Alberta, Edmonton, se encuentra localizada a 67 kilómetros de Tofield. Edmonton cuenta con todos los servicios que cualquiera pueda necesitar desde educación, servicios médicos hasta entretenimiento y centros comerciales, de hecho cuenta con el centro comercial más grande en Norteamérica, West Edmonton Mall abarca 5.3 millones de pies cuadrados y es visitado por más de 28.4 millones de personas anualmente; el centro comercial es increíble, no solo cuenta con tiendas y servicios pero también con parques (playa, juegos mecánicos, patinaje sobre hielo, etc), perderse dentro del centro comercial es muy sencillo u olvidar donde se estacionó el vehículo es frustrante si no se toma nota del código perteneciente al lugar que se elige.
Nuestras actividades aquí consistieron en aprender recetas de mi suegra, cocinar y cocinar, caminar alrededor de Tofield o la mayoría de las veces correr puesto que los mosquitos y las moscas nos atacaban, pasear a los perros, visitar a la abuela, checar Busy Bee (tienda de segunda mano en donde se encuentra de todo por un precio ridículo), compartir un día con mi suegro en su trabajo, sentarse alrededor del fuego después de cenas deliciosas o realmente no hacer nada y disfrutar de la tranquilidad del momento. Tengo que decir que este fue el lugar perfecto para poder arreglar algunos asuntos que estaban pendientes, dar mantenimiento a nuestras motocicletas, adquirir los elementos necesarios para poder acampar mejor y por último simplificar nuestras pertenencias.
Mis suegros tenían una tienda de campaña que nos proporcionaron y claro la tienda de campaña defectuosa regresó a la tienda donde la adquirimos, por eso es muy importante conservar los recibos. Los utensilios para cocinar y demás los adquirimos en Edmonton. Simplificar nuestras pertenencias fue fácil, saber que el peso es el factor más importante nos permitió adquirir algunos elementos faltantes y deshacernos de los elementos innecesarios. Esta noche cuando empaquemos notaremos la diferencia y mañana cuando acampemos sabremos si hicimos un buen trabajo.
El dar mantenimiento a las motos no será fácil y puede ser muy costoso si no lo hacemos nosotros mismos, así que para que esperar a mañana… hay que iniciar HOY, así lo hicimos, compramos los materiales y llevamos a cabo el mantenimiento regular que se le da a una motocicleta al alcanzar los 10,000 km. Lo principal es el cambio de aceite y el filtro del mismo también el cambio del líquido de los frenos. La cadena tuvo cuidado especial, la limpiamos muy bien y la engrasamos. Checamos cada parte de la motocicleta y nos aseguramos que todo estuviera en su lugar. Es importante hacer anotaciones de lo que se realiza en las motos y no perder nunca de vista que el mantenimiento prolongará o acortará la vida de la motocicleta dependiendo del cuidado que se le preste. La motocicleta de Brian cuenta con más de 20,000 km y su historia es diferente... Estoy contenta porque logramos llevar a cabo estas tareas importantes. Ahora estamos más que listos para partir…
Hoy iremos a comer con la abuela quien nos invitó para compartir el último día que nos queda aquí y conocer a los individuos con quien comparte su vida diaria. Estoy emocionada…
Todos estos días pensé en un tema que nos ha mantenido vivos y contentos: la disciplina. Gracias a esta palabra, cuando ejercitada, hemos podido llevar a cabo ciertas actividades… Me he preguntado como es que contamos con “Disciplina” de nuestro lado y en mi lado obtuve la respuesta con una palabra: “Zoila”. Para aquellos que tuvieron el gusto de conocerla sabrán que fue mi madrina y un ser muy especial. Cada vez que pienso en ella quisiera tenerla a mi lado puesto que estoy segura seguiríamos creando momento inolvidables, pero donde quiera que se encuentra se que me acompaña, me protege y me recuerda que la disciplina me puede llevar más lejos que cientos de pesos… A ella le debo el gusto por la limpieza y el gusto por ser eficiente, le debo mucho más pero con solo esto le debo el mundo… Una historia muy pequeña y chistosa es que un día en el pasado encontramos a un motociclista con problemas mecánicos en el camino y de todas las sugerencias ofrecidas la mía no fue escuchada: lavar la motocicleta primero para observar cual era el problema de una manera más transparente; si tan solo hubiesen escuchado a esta “Niña” no habrían pagado bastante dinero para transportar la motocicleta por más de 3000 km, el problema fue que el lodo acumulado en la llanta delantera bloqueaba algunas funciones… Madrina Zoila: estoy infinitamente agradecida por todos los regaños llenos de amor que me brindó… La extraño y no dejo de pensar en usted. Claro que al pensar en Zoila, otros dos nombres vienen a mi mente: “Estela” y “María” de quien les contaré más adelante. Por ahora solo les digo que las 3 son especiales para mí y que uno de los testigos de mi niñez, Doña Lala, me cuenta historias que me permiten saber que estas mujeres realmente lidiaron con un pequeño Diablito… Lo pueden creer?
También cuento con otro testigo, uno que me confirmó, cuando más lo necesitaba, que la disciplina es muy valiosa; Betty, mi gran amiga Betty a quien llevo conmigo donde quiera que vaya. Ella es una de las pocas personas que conozco que se conduce con disciplina y consistencia y con quien compartí muchos momentos de mi juventud haciendo travesuras pero nunca olvidamos la disciplina…
Bueno con todos estos caminos que estoy recorriendo hago un recuento de los valores que se necesitan y que hay que conservar pero también hago un recuento de aquellas actitudes de las que hay que deshacerse para crear una vida mejor. Lo bueno es que hay toda una vida para generar cambios.
En unos días llegaremos a Winnipeg en la provincia de Manitoba para visitar nuestro querido amigo Ignacio a quien no hemos visto por al menos 5 años, que lamentable. Aún recuerdo cuando nos conocimos en Córdoba y le doy gracias a la energía por haberme puesto en su camino, Ignacio es una persona de calidad y un hombre que permite salvar el honor de los Mexicanos, el es un hombre de bien quien se dedica a su familia y lucha por ella con amor y respeto. Ignacio, te admiro y pronto te veré para decírtelo en persona.
Tengo que dejarlos porque el desayuno en esta mañana me corresponde a mí…
GRACIAS POR LLEVARME DENTRO DE TI, ME CONMUEVE LO QUE DICES. TU VIVES EN MI ALMA CON ALEGRIA Y GRATITUD POR TODO LO QUE COMPARTIMOS Y APRENDIMOS JUNTAS. TE AMO DEYA.
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